Nuestras instalaciones en Jerez

Contamos con más de 2.500 metros de fábrica donde nuestros operarios se esfuerzan día a día en ofrecer                 el mejor servicio y la máxima calidad.

En nuestras oficinas tenemos personal cualificado para atender a nuestros clientes con el respeto y la eficacia que merecen.

 

Nuestras instalaciones en el Cuervo (Sevilla)

 

En la localidad del cuervo, situada en la provincia de Sevilla, contamos con una superficie de 14.000.- metros cuadrados, sobre la cual disponemos de naves de almacenamiento de mas de 4.500.- metros.

 

 

Internacionalización

Alimentación Animal del Sur está ampliando cada vez más sus horizontes, entrando ahora en un proyecto de internacionalización que permita mejorar su producción.

 

Tecnología

En los últimos años, ha evolucionado de forma considerable la tecnología de acondicionamiento de piensos compuestos.

Esta evolución vino marcada por las exigencias sobre la calidad física, la mejora nutritiva, la higiene microbiológica así como la flexibilización en la incorparción de nuevas y variadas materias primas.

En particular destaca el aumento en la incorporación de líquidos, especialmente grasas y melazas. En piensos de avicultura y porcino cada vez se trabaja con niveles energéticos más elevados, por lo que las grasas tienen un gran interés económico, pues su incorporación en porcentajes altos permite importantes ahorros. Sin embargo en fábricas clásicas su inclusión está muy limitada para mantener una calidad del gránulo aceptable.

Por estas razones, la tradicional elaboración de piensos (molienda, mezclado y granulación) cede terreno ante las nuevas tecnologías (extrusión, expansión, maduración, doble granulación, etc.)

En todos los casos, se trata de manejar a conveniencia los parámetros físicos: presión, temperatura y tiempo, que son los determinantes en un acondicionamiento. Todo ello va encaminado a obtener una buena calidad del gránulo, aspecto que cada vez adquiere más importancia tanto por razones comerciales, como por su influencia sobre los índices productivos.

Proceso de fabricación

En nuestras instalaciones llevamos a cabo un procesamiento clásico, para que las materias primas lleguen con la máxima calidad al envasado y nuestro pienso sean siempre el más natural.

Comenzamos con la molturación, que es el primer procesamiento que sufren las materias primas en la elaboración del pienso.

Con el molino se pretende conseguir la granulometría adecuada de las partículas en tamaño y forma según la presentación del pienso: harina o gránulo.

Existen materias primas (fosfato, carbonato, etc.) que por su presentación y por evitar un dispendio energético no es deseable que pasen por el molino. Para ello se instala una criba by-pass.

Para modificar a voluntad la granulometría de cada materia prima, es recomendable el sistema de premolienda, frente al de premezcla ya que usaremos el tamiz más adecuado, según la materia prima de que se trate, mientras que en premezcla todas las materias primas están obligadas a pasar por el mismo tipo de tamiz.

Las granulometrías diferentes favorecen la desmezcla del producto. Esto lo hemos de tener presente siempre, particularmente cuando la presentación del pienso sea en harinas.

El tamaño de las partículas dependerá del tipo de molino (martillos, rodillos), del diámetro de orificio de la parrilla o de las revoluciones del motor así como de otros factores:

estado de las placas de choque, superficie perforada y disposición de los orificios de la parrilla, número y estado de los martillos, cantidad de aire de la aspiración, etc.

Cuando el pienso se presenta en forma de harina, la granulometría ha de permitirnos una buena fluidez del mismo en la granja. Para ello es suficiente con que el nivel de "finos" (partículas que pasan por un tamiz de 0,5 mm) no sea superior al 20% o también es práctico para controlar la fluidez disponer de una serie de embudos con diferente diámetro de salida en el laboratorio.

Si por el contrario, el pienso se presenta en forma de gránulos, las harinas cuando entran en la granuladora deben respetar la siguiente granulometría:+

Superior a 1,0 mm hasta 10% 

Superior a 0,5 mm hasta 45% 

Superior a 0,3 mm hasta 25% 

Inferior a 0,3 mm mínimo 20% 

El clásico molino de martillos horizontal con todas las innovaciones que ha sufrido (alimentación, ventilación, etc.) es el que más puede verse en las fábricas, por razones de granulometría y funcionalidad (Ruetsche, 1989).

En los últimos años aparece en el mercado el "molino vertical" que parece tener ciertas ventajas en cuanto a rendimiento sobre el horizontal. Su uso es más frecuente en fábricas de premolienda.